Las moscas, esos "bichos" feos y molestos, aparentemente inútiles y cansinos, son las protagonistas del poema. Ser cotidianas compañeras las hace pasar inadvertidas, pero también les permite detenerse en lo valioso, conocer lo más oculto, acompañarnos sin estridencia y recordarnos mil cosas. ¿Quién no se ha entretenido mirando una mosca? .Y ellas mirándonos a nosotros...¿qué pensarán?.
En fin, nuestro respeto a "todo bicho viviente" y nuestra admiración al eterno Machado.
Gracias a María y a Alba por su excelente trabajo y a los organizadores, que están impulsando la lectura como lo que es: el combustible básico para una vida que merezca la pena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario